Orlando Torres Reyes, coordinador de programas en el CAM, presidió en la comunidad de Paraguay el análisis referido a la marcha del Autoabastecimiento municipal, en el cual ese Consejo Popular (CP) tiene una participación decisiva e inmediata.
Allí, en el CP más extenso y menos poblado del municipio, se refirió a la necesidad de imprimir un impulso a ese propósito, con el viento a favor, luego de reparado el sifón que abastece de agua a la zona y a todas las formas productivas, en las cuales el riego se efectúa por aniego, “un sistema que llega a todas partes”, o lo que es lo mismo a todos los productores.
Junto a autoridades del Partido, del Consejo Popular y los responsables de las principales formas de producción –la CCS Enrique Pereira y la granja del EJT-, visitó varios patios familiares, una de las tareas que más se ajusta a ese territorio, que al disponer ahora de agua segura, deberá aprovecharla para extraerle el máximo a ese recurso y contribuir al per cápita a que se aspira.
Esa distribución incluye una variada oferta de cultivos varios (15 libras de viandas, 10 de hortalizas, dos de granos y tres de fruta), amén de cinco kilógramos de carne, mensuales.
La marcha de la construcción de las naves (en total 150) que garantizarán ese último renglón, tanto a nivel del municipio, como de CP, explicada a los factores de la comunidad por Torres Reyes, lo fue también en posterior encuentro, presidido por el Intendente Yunis Silvente Calderín, y la asistencia del también coordinador Rolando Cantillo Hernández, José Francisco Sainz Machado, delegado de la Agricultura en el municipio, y a los responsables de las principales formas productivas a esa instancia.
Todas las cooperativas van a tener su nave, con esfuerzo propio y financiamiento que entrega el Consejo de la Administración Municipal, cumpliendo los requisitos de higienización y guardando la distancia requerida, según vayan a albergar aves, conejos y cerdos, tal como precisó Juan Rivas Mauri, director de la Unidad Empresarial de Base Avicultura Alternativa, quien calificó a la precaución como indispensable en tiempos en que predomina la COVID-19.
Silvente Calderín insistió en que el citado dinero (cuatro mil 500 pesos por nave), no es para ahorrarlo, sino para ejecutar esas instalaciones por las que tanto se espera para satisfacer las necesidades de la población, un monto que, por otra parte, es auditable y no puede tener otro destino que el ya mencionado.
Otra preocupación expuesta por el Intendente fue la que en sentido general prevaleció entre los participantes en el intercambio: la siembra de la campaña de primavera, la cual, según uno de los presentes, debió precederse de una condición sine qua non: la roturación de toda el área a sembrar, puesto que en el mes en curso y en junio las lluvias son abundantes y con la tierra encharcada esa actividad agrícola se enreda.
Se convino en que a pesar de ese factor adverso, la siembra deberá cumplirse en lo que resta de mes, y también que todas las formas productivas tienen que abastecer el punto de venta que le fue asignado, y que en total en el municipio ascienden a 41.
También se coincidió en que, entre las cuestiones impostergables, ocupa prioridad mantener con abundante oferta a los establecimientos (desde el punto de venta hasta el mercado agro estatal) a partir de ahora y hasta el venidero domingo 10 de mayo, Día de las Madres, por el imperativo que exige brindar la mayor oferta posible a quienes ahora serán homenajeadas en condiciones sui géneris, en medio de una pandemia que ha obligado al confinamiento social, a una mayor congestión en los hogares y a que este tributo se efectúe con ciertas restricciones, aunque con el mismo, o mayor cariño, que siempre.