Tomado de Diario Digital Venceremos
Escrito por Mayliovys del Toro Terrero // Fotos: M.D.T.T.
Carlos Alejandro en este espacio amplió los conocimientos agrícolas.
Carlos Alejandro Quero Vicet, alumno de séptimo grado de la secundaria básica Rubén López Sabariego en el Reparto Obrero, habla con dominio sobre la necesidad de cuidar la calidad de las semillas para lograr adecuados rendimientos agrícolas y garantizar alimentos más nutritivos para el consumo poblacional.
Este adolescente de 12 años integra desde hace ocho semanas el círculo de Interés de la Unidad Empresarial de Base de Semilla, en el Palacio de Pioneros Ramón Infante de la ciudad de Guantánamo. Allí ha aprendido a amar el trabajo con la tierra, a cultivarla y la importancia de aplicar la ciencia y la técnica para alcanzar mejores producciones.
Tanto ha calado el círculo de interés en su formación que asegura será ingeniero agrónomo: “igual que la profe María Luisa”, dice, y mira sonriente a la educadora a su lado, quien le ha impartido las clases durante esta etapa.
Aprovechar las mejores prácticas
El Palacio provincial de Pioneros Ramón Infante, fundado el 14 de junio de 1982, impulsa actividades vocacionales vinculadas a ramas de la producción y de los servicios en la provincia, y demuestra a niños y niñas la importancia de emprender determinadas labores en la sociedad.
Cada año lectivo la institución organiza tres cursos de ocho semanas, por los cuales transitan más de 850 estudiantes guantanameros. En este primer curso (octubre-diciembre) acudieron al Palacio nueve colectivos de primaria, secundaria básica y la Escuela Especial 14 de Junio, para conocer de 26 especialidades.
Los círculos de interés fomentan motivaciones al poner en contacto directo a los alumnos con las profesiones.
Giriannis Fat Michel es subdirectora en formación vocacional del centro, y explica que las clases en cada uno de los círculos de interés están a cargo de los instructores, quienes imparten los temas correspondientes a la pedagogía, la agricultura, el transporte, la electricidad, la construcción, veterinaria, elaboración de alimentos…
“La mayoría del personal docente procede de los organismos del territorio, quienes comparten su experiencia con los alumnos del Palacio y les demuestran el valor de los oficios y profesiones para la sociedad”, apunta Fat Michel.
Así lo confirma Juan Cumbá Pérez, instructor del círculo interés de gastronomía y los servicios, quien además de su labor como jefe de brigada de la cafetería Ditú Caribe, imparte la especialidad a una decena de educandos. “Les enseño las medidas higiénico-sanitarias que deben cumplir en la manipulación de alimentos, los trucos en la cocina, pero también las normas de cortesía, así se logra una formación integral”, comenta.
Por su parte, Yanicet Cuevas Jiménez, jefa de brigada en la Fábrica de Tabacos, asegura que el círculo de interés tributa igualmente a la superación del personal involucrado en el proceso docente.
“Yo, por ejemplo, nunca había dado clases, y aunque conozco bien mi oficio, me resultaba difícil al principio transmitir esa sapiencia. Pero ya me siento una maestra más, lista para captar a los tabacaleros del mañana”, afirma.
Orientar, formar…
Aunque la actividad vocacional se realiza también en las escuelas, el Palacio tiene vital importancia en esta faena, por sus características y condiciones, asegura Margot Hernández Leyva, metodóloga de la Dirección provincial de Educación en la enseñanza secundaria básica.
“La institución incorpora a los alumnos conocimientos del mundo laboral a partir de un medio participativo y desde edades tempranas, además de tener la posibilidad de mostrar las habilidades adquiridas en exposiciones”, precisa.
Igualmente, explicó que existen especialidades cómo explotación de transporte ferroviario, construcción civil, carreras pedagógicas, que dan la oportunidad a los estudiantes de noveno grado que más destacan en los círculos de interés, de estudiar esos perfiles de forma directa.
Margot Hernández: “Aquí se sustentan valores como la laboriosidad, el compañerismo, la disciplina, la responsabilidad y el amor al trabajo”.
Agrega la metodóloga que la cantidad de alumnos que pueden ingresar a estos perfiles, responden a las necesidades de la provincia para lograr la correspondencia entre la demanda del territorio y los círculos de interés que funcionan en las instituciones educativas.
De acuerdo con la Resolución No. 306 del 2009 relacionada con la continuidad de estudios y orientación vocacional, en el curso anterior ingresaron 20 alumnos a las especialidades de magisterio, uno en explotación del transporte ferroviario, y otro en construcción civil. Además se incluyó la posibilidad de formarse como docentes para las diferentes carreras tecnológicas.
Retos
El Ramón Infante propicia el acercamiento de los más jóvenes a las profesiones y oficios de interés local, aspecto medular para la provincia, pues permite que los pequeños incorporen habilidades, conocimientos y destrezas necesarios para construir su proyecto de vida y aportar a la sociedad.
Sin embargo, la institución en su encargo social requiere sistemáticamente del apoyo de los organismos, los cuales deben ver en los círculos de interés la cantera laboral que tanto demandan. Solo así este centro docente, fundado por Juan Almeida hace casi 40 años, cumplirá con el deber primigenio para el que fueron concebidos por Fidel Castro: asegurar la formación técnica, cultural, de patriótica y deportiva…de los hombres y mujeres del futuro.
Juan Cumbá instruye en torno a normas y métodos de la gastronomía y los servicios.